En el Perú, hoy enfrentamos la segunda ola en los casos de Covid-19, sin que existan respuestas colectivas y salidas claras a la pandemia. El gobierno peruano ha definido medidas para afrontar esta segunda ola cuando las cifras de fallecidos alcanzan los niveles de julio – agosto del 2020. Estamos como si estuviéramos, una vez más, reviviendo una pesadilla: un sistema de salud colapsado; las cifras nos identifican como el país de la mayor tasa de mortalidad en el mundo[1]; las fuerzas políticas con total incapacidad para ponerse de acuerdo y encontrar salidas conjuntas que remonten la actual situación en el más corto plazo.
En este contexto hacemos un llamado al conjunto del pueblo peruano, a nuestros gobernantes, a las fuerzas políticas, así como a quienes tienen gran influencia en la economía de nuestro país a establecer una plataforma común para dar salida a la crisis actual. Aquí las propuestas desde nuestro Centro de Estudios:
- Hacer una profunda reflexión nacional respecto a las causas que nos han llevado a esta situación, así como a identificar salidas conjuntas a la grave crisis sanitaria que solo es una muestra de la crisis sistémica que venimos atravesando como humanidad.
- Poner por delante la vida humana como máximo valor y, a partir de este predicativo, construir la más amplia unidad nacional para enfrentar la pandemia.
- Asumir el reto de contener la transmisión del virus lo que requiere acuerdos básicos entre el gobierno, la sociedad organizada y de toda la ciudadanía, es decir que cada uno haga su parte cumpliendo como mínimo, las medidas sanitarias establecidas por el gobierno.
- El sistema de salud debe dar un salto y no solo dar respuesta a la emergencia sanitaria por Covid sino también a todos los problemas de salud distintos al Covid, nuevos y preexistentes; atendiendo los requerimientos de hospitalización y otros tratamientos que actualmente han quedado postergados.
- Medidas inmediatas como las de asegurar el reparto de alimentos y agua para las ollas comunes y comedores populares impulsados por las mujeres, por ser respuestas articuladas y autogestionarias que son importantísimas para atender la emergencia.
- Coincidimos con los colectivos que proponen acercar los servicios de salud a la ciudadanía, sosteniéndose en la infraestructura del primer nivel de atención en salud y en la sociedad civil organizada. Por ejemplo, dar soporte económico y profesional, a los comandos anti-covid existentes en las distintas regiones, así como entregar kits básicos para la atención del Covid-19 (pulso oxímetros, medicamentos y oxígeno). De esta manera se podrá disminuir el número de personas contagiadas requieran atención médica hospitalaria.
- Establecer medidas concretas y prácticas para atender las necesidades básicas de las grandes mayorías que han quedado desempleadas, que viven del autoempleo, así como a los pequeños agricultores, emprendedores, microempresarios, pequeños y medianos empresarios; quienes llevan la peor parte. Brindar información fidedigna, clara y oportuna de alcance nacional sobre cómo prevenir y enfrentar el Covid-19 considerando la realidad multicultural de nuestro país, es decir, en distintas lenguas y respetando especialmente la diversidad cultural existente.
- Al gobierno y a los grandes empresarios, y en especial quienes detentan el poder del sistema financiero, les corresponde tomar conciencia de que medidas como un impuesto a las grandes fortunas son indispensables para salir de la crisis sanitaria que enfrentamos, colocando la vida humana por encima del dinero, así como hacer viable la recuperación económica y el ejercicio de la vida democrática. Sin estas medidas no será viable superar esta crisis sanitaria y tampoco la crisis climática, hoy denominada crisis existencial, que actualmente enfrenta nuestra especie.
- Establecer la Renta Básica Universal e Incondicional; que hará posible que la recuperación de la economía se produzca en el corto plazo y desde la base social. Los bonos propuestos son paliativos puntuales que no vienen solucionando el problema. Renta que debe ser abonada a cada ciudadano y ciudadana peruana desde el Banco de la Nación.
Finalmente, será indispensable implementar programas específicos dirigidos a los grupos más vulnerables, dada la situación de discriminación y exclusión en la que se encuentran como es el caso de la población indígena, amazónica, afroperuana, las comunidades LGTBIQ y otras, respetando sus características culturales.
Lima, 03 de febrero del 2021
[1] En agosto del 2020 la Universidad Johns Hopkins reportó que nuestro país tenía la tasa de mortalidad por Covid-19 más alta de los 20 países más afectados por el virus, medición lo ponía por delante de países como Estados Unidos, Brasil y México. Ver BBC Mundo 28 de agosto 2020. https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-53940042
Fuente de foto: el montonero.