Según el documento “Beneficiarse del sufrimiento” –presentado por la ONG Oxfam durante la primera reunión presencial del Foro Económico Mundial, realizada en Davos, Suiza–, en estos dos años de pandemia de Covid-19, el mundo ha conocido a 573 nuevos multimillonarios. Los sectores que más beneficios generaron fueron alimentación, energía, farmacia y tecnología. Sin embargo, en el mismo período, millones de personas fueron empujadas a la pobreza/miseria.
Los datos contenidos en el documento muestran que en ese período, la riqueza de los multimillonarios alcanzó un crecimiento del 42%, un incremento real de 3,78 billones de dólares. Hoy, la riqueza total de los 2.668 multimillonarios del mundo equivale al 13,9% del Producto Interno Bruto (PIB) a nivel global, sumando un total de 12,7 billones de dólares. Este valor corresponde a casi tres veces el registrado hace 22 años, es decir, el 4,4% del PIB mundial.
En 2021, Cargil –gigante mundial del sector de alimentos– tuvo ventas netas por 5 mil millones de dólares, y la mayor ganancia de su historia. Según el documento de Oxfam, esa compañía espera registrar ganancias récord nuevamente en 2022, lo que aumentará aún más la fortuna de la familia. En el sector farmacéutico, la pandemia ha generado 40 nuevos multimillonarios. Pfizer fue la que más vacunas vendió en el mundo, pero la que menos entregó ese producto a países de bajos ingresos. Según el informe, una estimación conservadora sitúa el margen de beneficio bruto de la vacuna de Pfizer/BioNTech en un 43 %. En 2021, esta empresa pagó 8.7 mil millones de dólares en dividendos a sus accionistas.
Desigualdad racial, de género y económica
Según el informe de Oxfam, es probable que Amazon haya sido “el mayor ganador corporativo de la pandemia”. El patrimonio personal de su fundador, Jeff Bezos, aumentó en 45.000 mil millones de dólares, desde 2020. Esta empresa, junto con Apple, Microsofit, Tesla y Alphabet, conforman cinco de las 21 entidades económicas más ricas del mundo.
Por otro lado, la pandemia ha incrementado las desigualdades raciales, de género y económicas, además de empeorar la falta de acceso a una atención médica de calidad. Las poblaciones negras, indígenas y latinas se vieron fuertemente afectadas en su calidad de vida durante estos dos años, según el informe de Oxfam.
En todo el mundo, los grupos racializados fueron los más afectados por la pandemia, como la población negra e indígena de Brasil, la casta dalit en India y la población latina y negra en Estados Unidos. Además, más de cuatro millones de mujeres trabajadoras no han podido regresar al trabajo en América Latina y el Caribe, una tendencia impulsada por los altos niveles de informalidad laboral y el aumento del cuidado doméstico. También según Oxfam, se estima que 5,6 millones de personas mueren cada año en los países pobres debido a la falta de atención médica. Este número corresponde a más de 15.000 personas por día.
Estos son solo algunos datos de los documentos. ¡Es increíble la cantidad de gente que aún defiende este modelo económico! Más impresionante aún es saber que llamamos “civilizadas” a nuestras sociedades actuales, a pesar de estas monstruosas disparidades que generan verdaderos genocidios en el mundo actual.
Bajo el lema de que “todo el mundo es libre de prosperar”, el capitalismo ha demostrado (siempre) su capacidad mucho mayor de empobrecer, de imponer escasez a la mayoría de la población trabajadora, que lo contrario. Pero al fin y al cabo ¿de qué libertad hablamos cuando nos referimos a un sistema tan perverso? ¿El que impone la elección del trabajo duro y el salario miserable o la indigencia? (y, en muchos casos, ni siquiera la primera alternativa, como sucede con cientos de miles de personas en la “Meca del capitalismo”, los llamados homeless). Definitivamente, el capitalismo es la barbarie misma.
En este enlace puede accederse a la versión completa del informe de Oxfam.