¿Es que no bastó con los 150 millones de personas muertas en las dos guerras mundiales?

¿Nuevamente somos las personas el combustible de sus intereses geoestratégicos?

Estamos asistiendo estos días a un espectáculo esperpéntico entre EE.UU. con la OTAN, y Rusia, tomando como títere a Ucrania haciendo un juego peligroso instigados por medios de comunicación aliados del complejo armamentístico que podría llevar a Europa y sus pueblos a una situación sin salida.

Los dirigentes de cada bando lejos de aceptar la nueva situación mundial de multipolaridad y nostálgicos de su época de superpotencias, siguen compitiendo por exhibir su poder militar pretendiendo mantener una supremacía en una política de bloques que ya está pasada de tiempo.

Estamos en ese nuevo Metaverse donde con los últimos medios tecnológicos se están mezclando seudo noticias y montajes de imágenes, cuya veracidad es imposible de averiguar por parte del ciudadano medio, con ciberataques y declaraciones belicistas. Todo ello generando un nuevo clima de temor cuando parecía que ya se estaba despejando aquello de la pandemia.

Lo que no es virtual es la cantidad de armamentos concentrados en la zona, en particular de material nuclear: Rusia y Estados Unidos poseen más de 11.850 armas nucleares. Francia y Reino Unido (miembros de la OTAN) tienen unos cientos cada uno, sin contar lo que Estados Unidos tiene almacenado en otros países de la OTAN: Bélgica, Alemania, Italia, Países Bajos y Turquía.

Más allá de intereses geoestratégicos de ambos lados en particular por la cuestión del gas y la conexión Rusia-Alemania con el gasoducto Nordstream2 [i], sería bueno preguntarse por las reales aspiraciones de la gente, de los pueblos en particular de esa zona, convertidos en peones en ese tablero … Los ciudadanos de cualquier lado del planeta , queremos vivir en paz, tener calidad de vida digna con salud y educación.

Por ello desde Mundo sin Guerras y sin Violencia, instamos por una parte a los gobiernos de la zona Europa:

  • a no dejarse arrastrar hacia una guerra que no es suya, dejando de seguir los mandatos de los EEUU, teniendo un emplazamiento verdaderamente neutral
  • poner en cuestión de una vez la existencia misma de la OTAN en sus territorios
  • a no usar distintas barras de medir a la hora de denunciar la ocupación de territorios

e incluyendo Rusia:

  • a retirar todas sus tropas enviadas a Ucrania, ayudando a la desescalada
  • firmar el tratado de prohibición de armas nucleares el TPAN
  • revertir las cantidades invertidas en armamento en favor de la salud (la pandemia puso de manifiesto su falta de inversión en ella) y la educación.

Invitamos por otra parte a las poblaciones a convertirse en protagonistas, manifestando de manera activa su reprobación de esas políticas belicistas, presionando a sus gobiernos para la firma del TPAN, organizándose de manera noviolenta para crear conciencia de que el militarismo no puede nunca llevar a la paz. La única vía es un proceso de paz centrado en las personas, con la metodología de la noviolencia.

¡Es hora de responder al clamor que viene del futuro! Es hora de que los pueblos, la gente común, la gente invisible, los que no participan en las negociaciones y no aparecen en los medios, hagan oír su voz en contra de la guerra y a favor de la paz.

¡Es hora de salir de la prehistoria, dando una oportunidad a la paz!

 

Graffiti ‘NO A LA GUERRA’ en el Metro de Moscou 22/02/2022.  Créditos foto : Twitter

 

Notas

[i] https://staging1.pressenza.com/es/2022/02/guerra-comercial-del-gas-entre-usa-y-alemania-la-trampa-de-estados-unidos/