50 miembros de Rebelión Científica protestan frente al Ministerio alemán de Transporte, de los cuales, 30 bloquearon los accesos al Ministerio Federal de Transporte e Infraestructura Digital en Berlín el martes alrededor de las 7:30 de la mañana como parte de su protesta continuada, que irá escalando a lo largo de dos semanas. Además, unas 20 científicas y científicos bloquearon las calles que rodean el ministerio en tres puntos. Las académicas y académicos, procedentes de distintos puntos de Europa, entre ellos España, pegaron en el edificio carteles de gran tamaño que reproducían artículos científicos sobre la crisis climática .
El propósito de la acción es exigir al gobierno que apruebe límite de velocidad nacional y la reintroducción del popular billete de 9 euros para el transporte público, en lugar de los 49€ propuestos por el gobierno. Las grandes pancartas que portaban las científicas y científicos vestidos con batas de laboratorio mostraban mensajes como «Detengan el inmovilismo desbocado» y «Unidos frente al fracaso climático«, así como «1,5°C = ficción política«. También llamaron la atención derramando sangre falsa en la zona de entrada al ministerio.
«Exigimos al gobierno alemán un límite de velocidad inmediato de 100 km/h en las autopistas y un billete asequible de 9 euros para el transporte público. El Ministerio de Transportes no ha logrado durante años ninguna reducción significativa de las emisiones. En esta crisis energética y del coste de la vida es urgente reducir el uso de los combustibles fósiles y permitir una movilidad asequible«, afirma la Dra. Nana Maria Grüning, bióloga molecular de la Clínica Universitaria Charité de Berlín (Alemania). «Como científicos, entendemos la crisis climática como una amenaza existencial. El objetivo de 1,5 grados ya no es alcanzable de forma realista. Ya es hora de que avancemos hacia la movilidad sostenible«. «De hecho, la crisis climática es la mayor motivación para que los alemanes cambien sus hábitos de movilidad. Esto es algo que el gobierno debería realmente apoyar«, dice el Dr. Sébastien Triquenaux, ingeniero del Centre National de la Recherche Scientifique (Francia).
Las insuficientes medidas de protección del clima del sector del transporte en Alemania contribuyen al fracaso del Acuerdo de París a nivel nacional. Es necesario informar al público sobre la urgencia de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, dada la posibilidad real de una catástrofe mundial.
A través de sus acciones de resistencia civil, Rebelión Científica, una coalición internacional de científicos y científicas fundada en 2021, exige una acción inmediata para limitar los crecientes impactos de la crisis climática – a nivel nacional e internacional. La comunicación científica tradicional y la promoción de políticas ya no son suficientes ante la emergencia planetaria. Como parte de la coalición «Unite Against Climate Failure» (Unidos Frente al Fracaso Climático), las académicas y académicos hicieron sonar la alarma de incendios el pasado domingo en la Cumbre Mundial de la Salud que se celebraba en Berlín y pegaron publicaciones científicas en el edificio de la conferencia. El lunes protestaron junto con la organización «Deuda x Clima» ante el Ministerio de Finanzas, pidiendo la cancelación de la deuda para el Sur Global.
Además de Rebelión Científica, los socios de la campaña de resistencia civil – que lleva en marcha desde mediados de octubre de 2022 – son Letzte Generation (Última generación), Debt for Climate (Deuda x Clima), End Fossil: Occupy! (Fin de los combustibles fósiles: Ocupemos), y Jetzt oder Nie – Eltern gegen die Fossilindustrie (Ahora o nunca – Padres y madres contra la industria fósil)
El Climate Emergency Fund (“Fondo de Emergencia Climática”) apoya el reclutamiento, la formación, la capacitación y los esfuerzos educativos de Rebelión Científica.
